16 de Noviembre-Optó por el riesgo del camino a Jesús
TEXTO BÍBLICO-San Lucas 1, 39-40
“Se puso en camino María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá. Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel”.
REFLEXIÓN
“María misionera salió de Nazaret simplemente para servir. Servía a Dios y serviría a su pariente necesitada. Había tocado su alma el que vino a servir y no a ser servido, y al instante dejó la Virgen el calor del hogar. Optó por el riesgo del camino de Jesús. Notable enseñanza la suya. No se entretuvo fuera de la vivienda de Isabel. Nos dice el Evangelio que entró a la casa. No le basta al misionero un saludo al pasar, ni las distracciones de afuera. Ha de entrar apenas abierta la puerta, como Jesús en el corazón de la humanidad.
(Cardenal Francisco Javier Errázuriz. Homilía en la Eucaristía Conclusiva de Aparecida. V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y de El Caribe. 31 de mayo de 2007)
TEXTO BÍBLICO-San Lucas 1, 39-40
“Se puso en camino María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá. Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel”.
REFLEXIÓN
“María misionera salió de Nazaret simplemente para servir. Servía a Dios y serviría a su pariente necesitada. Había tocado su alma el que vino a servir y no a ser servido, y al instante dejó la Virgen el calor del hogar. Optó por el riesgo del camino de Jesús. Notable enseñanza la suya. No se entretuvo fuera de la vivienda de Isabel. Nos dice el Evangelio que entró a la casa. No le basta al misionero un saludo al pasar, ni las distracciones de afuera. Ha de entrar apenas abierta la puerta, como Jesús en el corazón de la humanidad.
(Cardenal Francisco Javier Errázuriz. Homilía en la Eucaristía Conclusiva de Aparecida. V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y de El Caribe. 31 de mayo de 2007)
“En María, que solícita va a Isabel,
está la alegría de servir a los hermanos,
llevándoles la presencia de Dios”.
(S.S. Juan Pablo II. Angelus. 23 de octubre de 1983)
está la alegría de servir a los hermanos,
llevándoles la presencia de Dios”.
(S.S. Juan Pablo II. Angelus. 23 de octubre de 1983)
No hay comentarios:
Publicar un comentario